Soy un gato pierdevidas al que mordió un perro andaluz, Soy el grito que se calla cuando una madre apaga la luz, Soy el cobarde que lucha, el valiente sin fé, El exiliado en calma buscando asilo en el placer. Soy un beso de aeropuerto a quien nunca ha de volver, Soy la noche de licores que no sabe amanecer, Soy un canto que busca guitarra que lo temple, El vaivén desafinado de un tren que siempre se pierde. Soy lo que han hecho de mí, y algún detalle elegido, Soy el caminante quieto, soy memoria y soy olvido. Soy mi pasado y mi destino, nada tengo y De mis soledades vengo. Soy el reloj parado a la hora sin venida, Soy pecado en cada paso sin creer en otra vida, Soy sonrisa en quien la mira y suspiro en soledad, El acertijo errante de un lector de la ciudad. Soy lo que quieras que sea, si es que sabes creer, Soy el que nunca acierta con las cartas del querer, Soy un baile de máscaras en una Venecia hundida, El jugador al que los dados mandan al punto de partida. Soy lo que han hecho de mí, y algún detalle elegido, Soy el caminante quieto, soy memoria y soy olvido. Soy mi pasado y mi destino, nada tengo y De mis soledades vengo. Soy la pulga en el ratón que devora la serpiente Soy el tiempo que pasa mirando “Le temps qui reste” Soy la culpa y su prisión de barrotes de saliva, El que sospecha que la tentación siempre vive arriba… Soy un paria a la izquierda en busca de una salida, Soy el último orgasmo juntos, a modo de despedida, Soy el cuero golpeado dando ritmo a su dolor, El poema sin medida que escapó del domador Soy lo que han hecho de mí, y algún detalle elegido, Soy el caminante quieto, soy ganado y soy perdido. Soy mi pasado y mi destino, nada tengo y De mis soledades vengo. De mis soledades vengo….

La noche es... la patria del emigrante, Ella pinta a los gatos pardos por las plazas, por los parques Hogar, amargo hogar, del que sirve las bebidas, De este que suscribe, aprendiz de maleante y bala perdida La noche esconde mil caras De la misma verdad Y es que si la verdad tiene muchas, la noche tiene más... La noche, en la que bienviven los estraños Donde hay quien ama, aunque sea una vez al año... Mientras el Sol aprovecha para ir a entonarse al cuarto de baño Algunas camas se templan con recien nacidas del armario... La noche esconde mil caras De la misma verdad Y es que si la verdad tiene muchas, la noche tiene más... La noche, que no es de nadie, aunque de todos se apiade, De la estudiante soñolienta, del que llora por Buenos Aires, Del multicopista, de la reina de la pista, De los que se medican por propia prescripción facultativa De la Diva transformista, de la vida funambulista, Del madero farlopero, del que empaca los mentideros, Del que ve cine en La 2, de los que tocan esta canción De la que gasta los tacones mientras espera una subvención Y es que cuando para unos sirven copas Para otros pintan bastos La noche de los ojos y los cajeros cerrados, que no se cuele el desespero de las llagas del cuerpo del estado... La noche esconde mil caras De la misma verdad Y es que si la verdad tiene muchas, la noche tiene más...

Soy el fuego que arde tu piel Soy el agua que mata tu sed El castillo, la torre yo soy La espada que guarda el caudal Tú, el aire que respiro yo Y la luz de la luna en el mar La garganta que ansío mojar Que temo ahogar de amor Y cuáles deseos me vas a dar, oh Dices tu, mi tesoro basta con mirarlo Y tuyo será, y tuyo será...